El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se encuentra en un hospital de Sao Paulo y permanece estable, pero sin previsión de alta médica
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ingresó en la madrugada de este lunes tras quejarse de fuertes dolores abdominales. Según ha informado Presidencia, se le están realizando diversos exámenes ante la sospecha de que pueda estar con una nueva obstrucción intestinal, pero se encuentra bien de salud.
Bolsonaro, que estaba pasando unos días de descanso en una playa en el sureño estado de Santa Catarina, se trasladó en avión hasta Sao Paulo, la mayor ciudad brasileña. Una vez allí ingresó en el Hospital Vila Nova Star, cuyos médicos lo tratan desde que sufrió un atentado en 2018 que le afectó precisamente el abdomen.
Bolsonaro está en el hospital, pero se encuentra bien
«El presidente se encuentra bien», agrega la nota de la Presidencia, que anunció que divulgará más detalles sobre la situación del líder ultraderechista posteriormente, cuando emitan nuevos boletines médicos del hospital.
De acuerdo con un escueto boletín de Hospital Vila Nova Star, el gobernante ingresó en la madrugada con un estado de «suboclusión intestinal» pero «está estable y en tratamiento».
Los médicos atienden al presidente desde 2018, cuando sufrió un atentado
El centro de salud agregó que este mismo lunes los médicos que lo atienden desde 2018 evaluarán su estado de salud. Han adelantado, eso sí, que por el momento no hay previsión de alta.
Pese a que la Presidencia no divulgó detalles, médicos que atienden a Bolsonaro consultados por la prensa dijeron que la sospecha es que el jefe de Estado sufra una obstrucción intestinal similar a otras que ha tenido desde que fue acuchillado en el abdomen.
Dicho tipo de oclusión, según los especialistas, provoca dolores abdominales, vómitos y náuseas.
En junio, fue hospitalizado con los mismos síntomas
Hace escasos meses, el junio pasado, Bolsonaro ingresó también por una obstrucción intestinal y fue sometido a tratamiento convencional. En aquel entonces, sus médicos descartaron una cirugía y tras responder bien a los cuidados, recibió alta al cuarto día.
El jefe del equipo médico que atiende a Bolsonaro, Antonio Luiz Macedo, ha interrumpido sus vacaciones en Bahamas para atender al presidente.
Desde el atentado que sufrió cuando estaba en plena campaña para las elecciones presidenciales de octubre de 2018, Bolsonaro se ha sometido a cuatro cirugías recurrentes de las heridas que sufrió en el ataque.
En septiembre de 2020, además, el mandatario se realizó una quinta cirugía en Sao Paulo, pero para la extracción de un cálculo renal, y ese mismo año se sometió a una vasectomía.
Bolsonaro fue acuchillado mientras una multitud lo llevaba a hombros en un mitin electoral celebrado en la localidad de Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais.
Los agentes detuvieron al agresor inmediatamente después del ataque, pero resultó inimputable, pues el juez consideró que no estaba en capacidad de responder por sus actos debido a sus problemas mentales.
En julio de 2020, el líder ultraderechista dio positivo en covid-19 y estuvo veinte días aislado en el Palacio de la Alvorada, su residencia oficial en Brasilia, hasta superar la enfermedad.
